La Navidad continúa

Muchas veces pensamos que pasado el 25 de diciembre se terminó la Navidad. Pero en realidad es el 25 cuando inicia y se extiende a lo largo de 8 días. Por ello te invitamos a que sigas manteniendo la alegría y esperanza de saber que Jesús ha nacido y la lleves a los demás. ¿Cómo? ¡Pues con las obras de misericordia!

Hay catorce obras de misericordia: siete corporales y siete espirituales.
I.- Obras de misericordia corporales:

En su mayoría salen de una lista hecha por el Señor en su descripción del Juicio Final. Son:

1) Visitar a los enfermos
2) Dar de comer al hambriento
3) Dar de beber al sediento
4) Dar posada al peregrino
5) Vestir al desnudo
6) Visitar a los presos
7) Enterrar a los difuntos

II.- Obras de misericordia espirituales:

Han sido tomadas por la Iglesia de otros textos que están a lo largo de la Biblia y de actitudes y enseñanzas del mismo Cristo, como el perdón, la corrección fraterna, el consuelo, soportar el sufrimiento, entre otras, y son:

1) Enseñar al que no sabe
2) Dar buen consejo al que lo necesita
3) Corregir al que se equivoca
4) Perdonar al que nos ofende
5) Consolar al triste
6) Sufrir con paciencia los defectos del prójimo
7) Rezar a Dios por los vivos y por los difuntos*
Así pues, en estos días (¡y durante toda tu vida!) busca llevar la alegría que Cristo ha sembrado en tu corazón en esta Navidad siendo caritativo, buscando ayudar a los demás, estando dispuesto a sacrificar tu tiempo y espacio, y sirviendo en lo que se pueda.

Recuerda que cada acto y ayuda, por pequeño que sea, puede ser enorme ante los ojos de Dios y para la persona que recibe esa ayuda. No tienes que ir lejos: escuchar a tus amigos, visitar a tus abuelos enfermos, compartir tu comida con alguien, aconsejar a tus hermanos, consolar a tus padres, perdonar a quien te agrede...

Todos esos actos son obras de misericordia y, si los haces de corazón, traerán grandes regalos a tu vida. ¡Pongamos manos a la obra!


*Con información de Aciprensa.